Primera semana de abril 2018. Miedo a ser encontrado

Lunes 2 de abril de 2018
Empezamos (y terminamos) con el partido Ciudadanos y su estrategia, que resume la de todo el mundo en España: confiar en que los demás la caguen horriblemente. ¿Qué van a hacer ellos mientras? Nada. ¿Que es necesario mentir mucho? Pues ya ves.

Martes 3 de abril de 2018
Florecen los mañuecos. Mañuecos a go-go. Mañuecos en todas partes. Es el sucesor de Herrera. Pero, ¡ay! todavía no lo han confirmado. Y el hombre, como es tan discreto, pues no se postula. Juá. Es una plaga.

Miércoles 4 de abril de 2018
Esta Semana Santa en cuarteles y dependencias oficiales (¡y en el Ayuntamiento socialista de Valladolid!) se puso la bandera a media asta. Por la crucifixión de Jesucristo. Que note que lo sentimos. En serio.

Jueves 5 de abril de 2018
El ministro de Hacienda presentó unos presupuestos amañados, mezquinos y, lo que es más curioso, irrealizables. Todavía no tienen los apoyos para llevarlos a cabo. Qué más da.

Viernes 6 de abril de 2018
Alguno (o quizá todos) de estos organismos existe realmente. Yo me voy enterando, así, cuando salen. Un día escribían acerca de dos de ellos en la misma página. Sobre su oportunidad y competencia no me enteraré jamás. Ni yo, ni los que los forman, ni nadie.

Sábado 7 de abril de 2018
¡Pablo Casado! Es el mejor. A mí es que me vuelve loco. Todos (hasta ellos) reconocen que los presupuestos presentados en el Congreso son una puta mierda. Por eso es admirable el aplomo con que este joven defiende lo indefendible, mueve lo inamovible, alza lo subterráneo... Venga.

Domingo 8 de abril de 2018
Semana capicúa, como anunciaba la primera viñeta. Estuvo por aquí su líder y hombre providencial (este es el autonómico). Diciendo a todo el mundo lo que quería oír y oyéndose a sí mismo decirlo. Como todos.