sábado, 26 de septiembre de 2020

Cuarta semana de septiembre 2020. Esos pocos y preciosos días

 



Domingo 27 de septiembre 2020
Reprochan los agentes sociales al faltoso doctor Igea que no escucha. Los agentes sociales son los sindicatos y los empresarios. Creo. No sé si los autónomos. Igual. Mientras tanto Mañueco inaugura el curso universitario y se compromete a pedirle dinero al Gobierno central. Para dinamismos. 









Sábado 26 de septiembre 2020
En Madrid, espejo de lo que somos, han empezado a confinar por barrios. Confinar pobres es jodido. Porque nos meneamos mucho.  









Viernes 25 de septiembre 2020
De vez en cuando y por motivos, pues, se inventan problemas. Como no los hay de verdad... Llevan una temporada inculcándonos la idea de que una fantasmal población flotante está esperando a que salgamos a por tabaco para instalarse en nuestro piso. Insinúan (o afirman con dos cojones) que la policía no puede echar a estos imaginarios okupas. Lo que quieren en realidad (las personas y empresas que se enriquecen con tal actividad) son nuevas (u otras) leyes de desahucio más violentas y fulminantes.








Jueves 24 de septiembre 2020
Son nuestras costumbres y las respetamos escrupulosamente.








Miércoles 23 de septiembre 2020
 Me resulta cómico ver cómo individuos o colectivos exigen un trato diferenciado por privilegios que su territorio tuvo en el pasado. Se remontan, claro, de forma selectiva, a periodos gloriosos; cuando mandaban. No buscan igualdad. Buscan lo contrario. Con tales argumentos. Lo curioso es que también funciona al revés: ¡Esta torturada tierra debe ser compensada por...!








Martes 22 de septiembre 2020
Las calamidades no suelen dimitir. Hay que echarlas. Se puede hacer votando. 










Lunes 21 de septiembre 2020
El rebrote. La segunda ola. El virus ¿quién iba a decirlo? no se da reposo.