Última semana de diciembre. Baza de bastos

Lunes 22 de diciembre de 2014
Parece que 2014 ha sido un poquitín flojo en algunos aspectos (por culpa de los socialistas), pero que 2015 va a ser la monda. Coincide justo con las elecciones, además.

Martes 23 de diciembre de 2014
El fango tiene una poderosa gravedad. Las figuras que nos han acompañado (o explicado, en algunos casos) este año están perfectamente cómodas chapoteando en él. Cualquier cosa mínimamente digna se destaca con enorme estatura. Perdonen la digresión: el puto timo de la lotería.

Miércoles 24 de diciembre de 2014
En España la gente gastó tres mil seiscientos millones de euros en Lotería del Estado (¡sólo en Navidad, en un solo sorteo!). En premios se reparten dos mil quinientos veinte, de los cuales el Estado vuelve a recuperar inmediatamente quinientos cuatro en impuestos. Le hemos dado de forma voluntaria a Hacienda más de mil millones de euros. De un día para otro. A cambio de nada. Deberían bastar para cuadrar presupuestos, dar ayudas a todo dios y que viviéramos en un jamón comiendo de otro. Pero... no.

Viernes 26 de diciembre de 2014
Condonaciones, olvidos, componendas, chapuzas... La consejera de Hacienda de aquí y el ministro español de lo mismo haciendo cosas rarísimas con el dinero de todos. Los mil millones que nos han extraido con el impuesto/ lotería se perderán en el tiempo, como el sudor en un charco.
El jueves, día de Navidad, no salen periódicos de papel por motivos medievales y no hay viñeta ni nada. Que felices fiestas.

Sábado 27 de diciembre de 2014
Siempre tuve la ilusión de tener un abogado, como los famosos y los personajes de las películas. De pequeño le hubiera mandado a misa por mí. Ahora, para encargarle cosas: que denunciase a las compañías y a las administraciones. Todo el rato. Y ganase, claro.

Domingo 28 de diciembre de 2014
Con ese cabezón hay que ir a tallas especiales. Es por el cerebro. ¿He dicho ya más veces que el extraterrestre somos nosotros? Sí, ¿no?