Ernesto Rodera. Viñetas en el ADN. Tercera semana de diciembre de 2010

Viñeta del ADN. Viernes 17 de diciembre de 2010
En realidad no pagan al instante, sino un poco después. Pero pagan. Pagan.
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Viñeta del ADN. Jueves 16 de diciembre de 2010
Yo estoy equivocado. Todos los demás tienen razón.
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Viñeta del ADN. Miércoles 15 de diciembre de 2010
No se hagan componendas. Yo también creo paisajes y me hago figuraciones. Luego, no. Los malos se ríen bastante. Se lo pasan teta.
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Viñeta del ADN. Martes 14 de diciembre de 2010
Lo importante es ser feliz. Como decía Dickens: si uno gasta un penique más de lo que tiene es infeliz y si gasta uno menos, pues feliz. Así que haga como estas personas: despilfarre lo que no es suyo. Ya lo pagará alguien.
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Viñeta del ADN. Lunes 13 de diciembre de 2010
Cada cosa a su tiempo. Hay que digerir. Si no, pues se pone uno de mal humor. Recordemos lo que son los humores: aire, agua, fuego y tierra y su correspondencia con la sequedad, la humedad, el calor y el frío. O no. Yo qué sé. Pregúntenle ustedes a Hipócrates.
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Ernesto Rodera. Navidad 2010-2011

Pues eso. Yo soy el cocodrilo. Feliz año y felices Fiestas y tal. Ya se acaba 2010. ¿Qué año empezará a continuación? ¿¡Y cuándo?!
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El año pasado. 2009. Parece empezar a repetirse cierto patrón.
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Haciéndonos los graciosos. Año 2008.
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Sobria y elegante postal. El invierno y el tránsito. No duraría. Habría que volver a las moñoñeces. Se acababa el año 2007.
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Ejem. Bueno. Sí. En 2006 fue obligatorio burlarse del grotesco Photoshop que, luego se averiguaría, ejecutó la reina de España. No se puede saber de todo. Con perro y gato. Y Fantomas.
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Se conoce que a mi señora (que entonces todavía no lo era) le gustó la cosa. Año 2005. La parejita. Los niñardos no somos nosotros, pero tienen una cara graciosísima.
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Supongo que empecé a hacer ciberfelicitaciones (no, no se me ocurre un nombre más idiota) navideñas el año 2004 porque ésta es la primera que recuerdo. Alcohol y soledad. Muy apropiado.
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